Pronto llegarán los Reyes

Si, ya se que falta un montón pero es que a mi me hace mucha ilusión despertarme por la mañana y ver los regalos en el sofa. Afortunadamente todavía no he llegado a esa etapa en que los regalos típicos sean una corbata y bote de colonia, como es el caso de mi padre al que siempre le regalamos un bote de after shave dos litros de Brummell o de Barn Dandy (es suerte de no tener un padre sibarita).
Estos pasados Reyes, Mayte, mi mujer, fue también cómplice de mi afición a los juguetes y me regaló el precioso Belén de los click de Famobil. Hasta madrugó un montón para montarlo, barrer el pesebré, fregar la cacerola y sacar brillo a la estrella:

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(Espero que este año NO me regalen a los 3 Reyes Magos con sus camellos. Mi colega Chefo montá un Belen casi todos los fines de semana pero únicamente pone de figuritas camellos. Manías que tiene uno)
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Lo que me lleva a recordar de manera melancólica mis primeros juguetes.
El que más horas, sin duda, me tuvo entretenido fue el Fuerte de Comansi. Bueno no sé si era de Comannsi, lo que recuerdo que tenía una torre de vigilancia y que los muñecos noeran de misma escala que el fuerte y no podian entrar a la taberna (quizás por eso yo tampoco suelo entrar mucho).

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Era ver una película en la tele o en el Betamax de mi abuelo y revivirla. Las de Esteso y Pajares no las revivía aun por aquel entonces. Ahora si que me suelo hechar alguna carrera por el pasillo con "el mandao" al aire en busca de mi esposa.

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(Lástima que no se comercializará el vaquero Charles Bronson)
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Otros juguetes de mi niñez eran los guantes de Mazinger Z para pegar a mi hermano o el Exint Castillo, del que siempre salían piezas entre los cojines del sofa. Pero sobre todo lo que más me divertía eran los sobres sorpresa que me compraba mi abuela en una tiendecita de la calle Pignatelli.

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Ni Montaman, que decía mi amigo Dani, ni leches, lo mejor los sobre sorpresa y si salían jinetes y caballos, mejor que mejor. Además recuerdo haberme tragado más de un muñeco y llevarme encima dos hostias por parte de mi abuela.

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(Seguramente a mi amigo XCAR le regalarían este en vez de los de soldaditos. Así de listo me ha salido)
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Ya de más mayorcico he seguido manteniendo la ilusión por los juguetes. Tengo algún que otro muñeco de Los Master del Universo y la primera serie de muñecos de Secret Wars.

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(Las tentáculos del Dc. Octopus y las garras de Lobezno no llegaron a durar ni una semana).
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También he teneido varios juegos de mesa pero la verdad es que no me gustaban. El Monopoly se me hacía eterno y La Ruta o el Imperio Cobra jugadas dos partidas perdian toda su gracia.

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Pronto llegarán las navidades y ya voy mirando con la ilusión de un crio los escaparates. Ya hace un año vi un Geyperman que me llegó al alma por su toque freaky. Ayer noche se lo pedi a mi mujer y con la boca muy muy muy pequeña me dijo que no me lo iba a regalar.

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(Tenía el caballo, el helicoptero e infinidad de trajes)

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Bueno, aunque todavía falta tiempo, me empezaré a ilusionar con la noche del 6 de enero e ire ya redactando la carta para que mis amigos malavideros me puedan ir corrigiendo las faltas.

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Querido Reyes de Oriente,
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Como este año me he portado bien.....

(Lo mejor la cabra, pero puestos a buscar pegas hecho en falta a la otra mascota. No, no es a Franco, si no al mono)
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AVISO IMPORTANTE: La semana que viene regalaré ejemplares del último tebeo de la Ed. Cornoque titulado, como ya todos sabeis, de LOS BONILLA... de tal palo tal astilla. Estad todos atentos a este blog para saber como conseguir uno.