domingo, agosto 28

La mejor boda de toda mi mi vida

Enlace El Lider y La Presi



Como espero ya sepa el mundo entero ayer llevé a cabo un acto que cambió radicalmente mi vida: Levanté la taza del WC antes de orinar.
Para quién le haya defraudado porque pensaban que iba a decir algo del estilo "me casé", pues lo siento. Moralmente llevo (y actuo) como tal desde hace casi dos años.
Como imagino que el tema de la taza del WC no es muy interesante voy a dar cuenta del otro que a efectos de las sensaciones causadas en todos los asistentes creo que es lo más correcto.

La mañana salió lluviosa pero algo me decía que en este día todo sería perfecto. No era consciente de los escalofriantes sucesos que acontecerían. Me probé el traje (que extrañamente me iba más justo de lo que recordaba) con pulso tembloroso. La forma en que me despedí de mis compañeros malavideros la noche anterior no era para menos: Cantando canciones de Nicola Di Bare con más cervezas en su interior que el almacén central de Galerias Primero. Además el nivel de cachondeo y risas obtenido durante esa noche hacía presagiar lo peor.

Una vez en la iglesia me hallaba saludando a todos los invitados de los que era capaz cuando de repente vi aparecer al conocido grupo de imitadores de Rafaela Carrá conocido como MALAVIDAS. Esta vez la sorpresa fue ver a tres espectaculares mujeres que los acompañaban que tarde poco en reconocer: Pum, Sol y Marta.
Me recreaba yo en tan bellas mujeres cuando de repente apareció un mendigo arapiento armando una tremenda algarabía con una especie de tambor africano. La mayoría de la gente se asustó al verlo aún más que al ver a Xcar y Moratha.


Chefo estaba increible y hecho todo un señor. Su look era una mezcla entre policía secreto o narcotraficante colombiano. Eso sí, espectacular.



(Chefo causo sensación entre las féminas y porretas)

Berni iba de Surfero casual pero con un pantalón vaquero de precio muy aproximado al traje de novio con zapatos y gallumbos incluidos. Tomo buena nota de todo lo que vió para hacerlo el año que viene.
(Bernal con la ceja, todavía, sin afeitar)

Ah, Xcar añadió a su cuidado y estudiado look una preciosa corbata:
(Xcar con su preciosa corbata)

Moratha sólo vino a medias ya que 17 kilos de él se quedaron en Daroca.
(Fotomontaje de Moratha hoy y hace dos meses)

En la ceremio el sacerdote (amigo de los novios) empezó realizando una ceremonia que me recordó a los monologos del club de la comedia. Empezaba a ponerme ya nervioso cuando de repente nos hizó subir al altar junto con unos malavidas y un peluche que bendijo. Además (lo siento Xcar) nos regaló el caliz y plato de consagrar la sagrada forma con que ofició la ceremonia que fue preciosa.

Al terminar nos tirarón arroz y todo eso. Ya por la noche, al quitarse La Presi el tanga, salieron varios granos y un langostino.

Tras todo esto llegó el momento de la cena y todio transcurrió muy bien con los típicos gritos de ¡Vivan los novios! y ¡Que se besen los padrinos!. Bueno, añadir otro que salío de una conocida garganta totalmente resquebrajada que dijó ¡Vivan los borrachos! a los que varios elementos aun por identificar contestarón ¡¡¡¡Viva!!!!!!

Terminados los postres monté un poco de mi conocido espectaculo agradeciendo a todos (menos a uno del que no estaba yo muy seguro) la asistencia a nuestro enlace. Mi madre cantó su jota, lloró un poquico y cuando todos estaban a punto de llorar hizó su aparición la figura de la noche: Crispín d' Olot que canto varias canciones y dejó al público anodadado.

(Impresionante durante todo el día Crispín)

Cuando ya la gente creía haber visto todo lo posible por ver apareció Chechu, un íntimo amigo de Mayte, que la describío muy someramente y después metió al novió en un lio enorme para ver los conocimientos que tenía sobre la novia. Aquí El Lider ejerció como tal y a la pregunta de "Ciudad donde se celebra el Salón del Comic (con la B)" contestó Valencia. Serían los nervios.
Después de esto llego Xcar. Se mascaba la tragedia en el ambiente......
No tuvo palabras para describir al novio y rápidamente se lanzó a cantar sus conocidas jotas guarras. Uno de los fines de estas jotas eran provocar a los representas castrenses que se hallaban en la sala. Lejos de hacerlo y sabido el ambiente distendido (por decir algo entendible) de los cuarteles fue el que mejor sensación causó. Y aún más al gritar ¡¡¡Viva la República!!) esto te lo explicaré otro día Xcar).
Tras esto los malavideros (nunca os lo agradeceremos lo suficiente) nos hicieron entrega de originales enmarcados con La Presi y yo como protagonistas y a todos los asistentes les dieron un especial Malavida de tirada limitadísma (gracias otra vez chicos). Las malavideras no se quedaron tampoco cortas y nos hicieron entrega de otro regalo increible que disfrutaremos (y merecidamente) a la vuelta.
Tras esto se pasó al baile (¡Que horror!) y a las copas. Una vez más Moratha dió una lección de como beber sin parar. Tras un buen rato el metre muy discretamente se acerco y me dijo al oido "Su compañero el de la barra se ha bebido a base de calimochos el vino de las tres próximas bodas ¿Seguimos poniendole de beber?" Yo asentí con dolor y creo que en las bodas de aquí a octubre en el restaurante Gallarre se celebrarán con Cacaolat.
Poco más puedo decir, bueno que los perdí a eso de las 6 y media de la mañana (¡Como irian ya!).
Dar las gracias a todos los presentes: familiares y amigos y muy muy muy especialmente a los malavideros. Chicos y chicas sois i n c r e i b l e s. Gracias.

(Foto histórica, lástima que no estuvieran todos los malavideros)

Y gracias a Bernal por su magnifico reportaje fotográfico. Aquí.